jueves, 17 de septiembre de 2015

Para MARÍA.

¡Un nuevo amanecer comienza!


¡Mi María!

   Había mil latidos antes de saberte
Mil y un cuentos me hablaban de ti
Un baile se palpaba en mi vientre
Danza sempiterna de tu hálito habitando en mí.

   Hoy, el universo se contonea
Vibrando al compás de tu figura
Mientras el sol en tus ojos se mira,
la luna, esculpe tu rostro elevando la marea,
imitando tu reflejo en la mar y la laguna.
Rostro que supiste grabar
En las retinas que te miran.

   Sortilegio que embriaga infinita ternura
Entre canícula y frescura
Tu gran belleza interior.