jueves, 22 de marzo de 2018

DESPECHO


DESPECHO

Qué extraña honradez te deleita y habita,
cuando te dibujas palabras en el pecho
con flores de gacela…
y después, te consuelas
con verbos de burla e infamia.
al grito de libertad clandestina y despechada.
Atacas la piedad y destruyes la ternura
haciendo sordo cualquier lamento

y a la faz del semblante crucificas.
Si, alguna vez amaste...
no es la difamación la clave,
ni el despecho el perdón
para liberar tu desidia…
Tendrás que volverte despacio, 

muy despacio,
lentamente...
para que no te aterrorice tu propio reflejo
en el último bagaje en solitario.
II
Cuando las sombras que te habitan
juzgan, tiñen de negro todo lo que predicas,
y el mundo, se oscurece con tus huellas.
¿Qué mente atronadora irrumpe en tu sueño?
¿Qué extraño despecho afanas
abriendo puertas que siempre
permanecieron cerradas?
¿Quién te concedió el derecho
de robar flores en jardines ajenos?
Execrables conjugaciones bordan
los hemisferios
cuando la palabra se esconde
detrás de panfletos
y, no va acompañada con el ejemplo.


© Mercedes Dueñas. -ESPAÑA-